En noviembre de 2021 tuve la oportunidad de asistir a la Secretaría de Relaciones Exteriores a presenciar el conversatorio de los galardonados con el premio Nobel de la paz en América Latina. Fue una experiencia enriquecedora y de gran aprendizaje, porque estar frente a personas que han luchado por la paz y los derechos humanos es admirable y un orgullo para aquellas personas a quienes representan. En la introducción, Laura Sprechman, CEO de la fundación Nobel Prize Outreach, y Kjersti Flogstad, directora del Centro Nobel de la Paz de Noruega, a pesar de no haber podido asistir personalmente, dieron su mensaje a través de plataformas digitales subrayando abiertamente el reconocimiento a quienes trabajan por la paz en el mundo. Posteriormente el canciller Marcelo Ebrard ofreció unas palabras de bienvenida y señaló que México ha sido siempre un promotor de la paz.
Para mí, como egresada de la carrera de Relaciones Internacionales de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, un punto que me pareció importante en este conversatorio fue el tema de las armas, el momento en que el consultor jurídico Alejandro Celorio mencionó que estaban demandadas 11 empresas norteamericanas debido al impulso de fabricación de armas, y que esto dañaba a toda América Latina.
Rigoberta Menchú, premio Nobel de la paz 1992, apoyó este punto y añadió que había muchas víctimas de crímenes causados por la misma humanidad. Tanto ella como Edmundo de Alba Alcaraz, premio Nobel de la paz 2007, hicieron un llamado a las y los jóvenes para que siempre luchemos por nuestros derechos, nuestra dignidad, nuestra libertad y podamos llevar el futuro de nuestro país por un mejor camino mediante relaciones de paz.
Hubo también participaciones de otras personalidades y autoridades, como el embajador de la Unión Europea (UE) en México, Gautier Mignot; José Manuel Durao Barroso, premio Nobel de la paz 2012, quien asistió a nombre de la UE; Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la paz 1980, y Óscar Arias Sánchez, premio Nobel de la paz 1987. A pesar de que los últimos tres mencionados no pudieron estar presentes, dieron sus mensajes a través de plataformas virtuales, refiriéndose a la importancia y el significado de recibir un premio Nobel, y destacaron que “La paz no es solo la ausencia de guerra, es un estado de ánimo, un espíritu de benevolencia”, a lo que añadieron que es una gran responsabilidad. últimos tres mencionados no pudieron estar presentes, dieron sus mensajes a través de plataformas virtuales, refiriéndose a la importancia y el significado de recibir un premio Nobel, y destacaron que “La paz no es solo la ausencia de guerra, es un estado de ánimo, un espíritu de benevolencia”, a lo que añadieron que es una gran responsabilidad.
SE REPITE CON MAYOR
HICIERON UN LLAMADO A LOS JÓVENES
PARA QUE SIEMPRE LUCHEMOS POR
NUESTROS DERECHOS, NUESTRA DIGNIDAD,
NUESTRA LIBERTAD Y PODAMOS,
LLEVAR EL FUTURO DE NUESTRO PAÍS
POR UN MEJOR CAMINO SIEMPRE
MEDIANTE RELACIONES DE PAZ
últimos tres mencionados no pudieron estar presentes, dieron sus mensajes a través de plataformas virtuales, refiriéndose a la importancia y el significado de recibir un premio Nobel, y destacaron que “La paz no es solo la ausencia de guerra, es un estado de ánimo, un espíritu de benevolencia”, a lo que añadieron que es una gran responsabilidad.
Otra frase dirigida a todas y todos los jóvenes presentes en la sala y que personalmente me inspiró y me llevé conmigo, fue la del Dr. Harvey James Alter, premio Nobel de medicina 2020: “Para el éxito no hay elevador, hay que subir las escaleras”. Esto me resulta muy alentador pues, al igual que los ganadores de este premio, nunca podré imaginar lo que depara el futuro, simplemente daré lo mejor de mí y el reconocimiento llegará solo.
En esta ocasión pudimos convivir jóvenes de diferentes facultades de la UNAM, así como de otras universidades y al final tuvimos la oportunidad de participar en una breve ronda de preguntas y respuestas con los premios Nobel.
Fue una experiencia muy interesante y emocionante para mí; me sentí honrada porque no siempre puedes conocer y presentarte ante un ganador o ganadora del premio Nobel y recibir de ellos algún consejo que te dejará una enseñanza a lo largo de tu vida profesional.
*Egresada de Relaciones Internaciones en la FES Acatlán y realiza su servicio social en la DGECI.