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29 de febrero de 2024

Música china para guitarra. Una colaboración que estrecha lazos culturales

Por: Luis Angel Poblett
Este proyecto surgió a partir de tres grandes inquietudes que en un determinado e inevitable punto de mi vida se entrelazaron y dieron lugar a esta idea. En primer lugar, mi temprano gusto y mi interés por músicas de distintas partes del mundo con una marcada diferencia respecto de las sonoridades occidentales a las que estamos acostumbrados. En segundo lugar, mi creciente identificación profesional con la música contemporánea. Y en tercer lugar, mi cautivada atención y admiración por la cultura china, que surge como consecuencia de haberme involucrado con sus artes marciales tradicionales.

Intercambio académico y diálogo cultural

UNAM China


Un proyecto musical que une las tradiciones musicales de Occidente y Oriente es el resultado del trabajo académico que presentó Luis Angel Poblett, alumno de la Facultad de Música de la UNAM (FaM), para obtener el grado de Licenciado en Música, Instrumentista, en la especialidad de guitarra.

El artista presentó como tema de tesis en 2023 Las 6 armonías de las artes marciales chinas como herramienta complementaria, con un examen teórico y práctico que incluyó un concierto, realizado bajo la supervisión de un sínodo integrado por la profesora Marina Tomei y los profesores Carlos Felipe Martínez y Juan Carlos Ponce. La colaboración académica para este proyecto fue posible gracias al convenio entre la FaM y el Conservatorio Central de Música de China (CCOM), que cuenta con el apoyo de la Sede de la UNAM en el gigante asiático.

Poblett interpretó obras originales de compositores del CCOM en una fusión de música tradicional china con la guitarra, un instrumento occidental.


Pero el rumbo de mi proyecto de titulación cambió cuando decidí realizar una investigación en torno de la forma en que mis conocimientos sobre artes marciales chinas podían resolver problemas propios de la práctica interpretativa en el campo de la guitarra clásica. El proyecto tenía que ir acompañado de una propuesta de concierto, y si bien la Facultad de Música (FaM) no me obligaba a ambos tuvieran una relación, me di cuenta de que la música china representaba con precisión lo que estaba buscando. Tenía que plantear un proyecto que pudiera satisfacer mis necesidades personales, profesionales y artísticas; de encontrar las obras correctas, lograría desarrollar un concepto redondeado y con un repertorio congruente que me interpelaría profundamente.

Cuando comencé a plantear mi proyecto de titulación tenía la idea de llevarlo a cabo con una propuesta distinta en cuanto al repertorio. No tenía realmente claro qué música iba a interpretar; sin embargo, sí estaba seguro de que quería reflejar mi gusto por la música oriental. En el proceso de estructurar mi proyecto me encontré con varios obstáculos: era muy difícil, por ejemplo, reducir una variedad tan vasta de música como simplemente oriental; era igualmente complicado conseguir música de culturas en las que la barrera del idioma obstaculizaba mi búsqueda, o bien la música que yo estaba buscando no había sido escrita para guitarra.

Pero el rumbo de mi proyecto de titulación cambió cuando decidí realizar una investigación en torno de la forma en que mis conocimientos sobre artes marciales chinas podían resolver problemas propios de la práctica interpretativa en el campo de la guitarra clásica. El proyecto tenía que ir acompañado de una propuesta de concierto. Si bien la Facultad de Música (FaM) no me obligaba a relacionar mi proyecto de investigación con mi propuesta de concierto, me di cuenta de que la música china representaba con precisión lo que estaba buscando. Tenía que plantear un proyecto que pudiera satisfacer mis necesidades personales, profesionales y artísticas; de encontrar las obras correctas, lograría desarrollar un concepto redondeado y con un repertorio congruente que me interpelaría profundamente.

Seguía siendo consciente de que aún enfrentaba el reto de encontrar obras para guitarra, pero al menos ya tenía una idea concreta del repertorio que estaba buscando. Yo quería interpretar música que reflejara de manera auténtica la cosmovisión china de la música actual, tomando como base la guitarra. Al inicio de mi búsqueda encontré arreglos de melodías populares, pero eran muy limitadas, en primer lugar, por la naturaleza del instrumento (no fueron hechas para guitarra) y, en segundo lugar pero no menos importante, porque los arreglos habían sido elaborados por personas ajenas a la cultura china, lo que sesgaba la percepción de esa música y la reducía a una limitada percepción de arreglistas occidentales.

Era 2019 y, para mi suerte, se estaba celebrando el IV Festival de Música de la UNAM y el CCOM, como parte del convenio firmado en Beijing. En el festival, realizado alrededor del eje temático Ecos de la Ruta de la Seda, la FaM fue sede durante una semana completa de conferencias, clases magistrales y conciertos de reconocidos profesores e intérpretes del CCOM, que fue posible traer a México gracias a la Coordinación de Relaciones y Asuntos Internacionales (CRAI) y a la Sede de la UNAM en China, y al CCOM, por cuyas gestiones también fue posible enviar representantes de la UNAM a China.

En aquel preciso momento establecí contacto con el profesor de composición y piano Marco Alejandro Gil, que se encontraba desarrollando actividades en el CCOM; su mediación me permitió entrar en contacto con jóvenes compositores sobresalientes de esa institución y establecer el proyecto de estrenar y registrar en video las obras que compusieran para mí.

Con este proyecto no sólo pude satisfacer mis necesidades artísticas, sino también aprender y crecer profesionalmente, pues me vi obligado a trabajar con gran intensidad para alcanzar una perspectiva artística diferente.

Se dice popularmente que la música es un lenguaje universal y en ese sentido pude apreciar claramente en sus partituras la forma en que los compositores chinos concebían el sonido, la estructura, la textura y el color, cada uno en su propio estilo, pero compartiendo claramente una cosmovisión muy particular, ausente de la música occidental que yo había estudiado por años. Dentro de este lenguaje universal que es la música, pese a las diferencias pude entender su discurso y a la vez hacer mi aportación como músico y guitarrista mexicano.

Colaborar con los compositores chinos fue muy satisfactorio en términos profesionales y personales. Son músicos con un nivel verdaderamente alto, de manera que su compromiso con la música los lleva también a ser muy amables y comprometidos con las personas con quienes trabajan. Pese a la barrera del idioma, no hubo problemas para colaborar en las aclaraciones sobre las obras que escribieron, incluso a pesar de que dos de ellos nunca habían escrito para guitarra. Precisamente este último factor me dio en gran medida una idea de la forma en la que ellos pensaban la música, pues a diferencia de los compositores occidentales que ya cuentan con un lenguaje de escritura bastante estandarizado, los chinos planteaban sus ideas de una manera más personal y libre.

Las obras que interpreté fueron Ilusiones de Fuhong Shi, Ecos de la memoria de Wen Ziyang y Duge de Zhao Tianyi. En las notas de sus partituras escriben:

Ilusiones
Un viaje. Caminando a través del desierto de Gobi. Hay un río con abundantes fuentes que vierten desde las partes más altas. Después se revela que el río era una ilusión, un espejismo. Si uno sigue buscando a lo largo del río en dirección a la fuente, uno podría desaparecer por siempre en la inmensidad del desierto de Gobi. Esta experiencia me inspiró. Un proverbio budista dice: “Flores en el espejo y la luna en el agua son ambas ilusiones. ¿Cuál es la diferencia entre yang y yin, realidad e ilusión, esencia y apariencia, sustancia y espejismo? ¿Por qué es tan difícil distinguir entre ellas?” (Fuhong, 2007)

Ecos de la memoria
Lo interesante es que los seres humanos de diferentes regiones pueden estar conectados por estos recuerdos comunes en la dimensión del tiempo. Esos fragmentos familiares e inciertos nos guían a través de la niebla de la historia hacia un Palacio de la Memoria imaginario, donde los mayas crecen en el campo y la civilización china se recupera a lo largo del río. La Tierra es nuestro hogar. Este trabajo fue influenciado por la música china del guqin, que es una de las primeras formas de música china conocidas. Hay muchas similitudes entre el guqin y la guitarra clásica, pero lo más importante es que no importa si producen un sonido brillante o no, sino que escuchan su corazón en silencio. La estructura proviene del Daqu de la dinastía Tang (año 618): “libre - lento - medio - rápido - libre”; requiere que el intérprete maneje la velocidad de la forma más libre posible. La música alcanza su clímax en el desarrollo de un “estilo guqin” y se desvanece tranquilamente. Al final de toda la pieza, la guitarra interpreta el trémolo armónico, que representa la esperanza. Esos recuerdos comunes de la humanidad en cierto momento nos llevarán a un futuro pacífico: el eco de la memoria. (Wen, 2020)

Duge
Cuando estaba solo en un país extranjero, bebía vino para aliviar mi dolor, y cuando la luna estaba nublada y mis ojos mareados vagaban, cantaba “月下独酌” (Yuè xià dú zhuó; Bajo la luna, bebiendo solo) de Lǐ bái. La primera parte, “DUI YIN”, se toca con un ritmo desordenado para expresar la embriaguez. La segunda parte, “YING WU”, toma el significado de una melodía marcial de pipa china y agrega un ritmo de baile característico para expresar el antiguo campo de batalla chino. La pieza viaja por el pasado y el presente, utilizando la danza como guía de la embriaguez, buscando el orden en el caos, deambulando por la primavera y el otoño y comprendiendo la vida. (Zhao, 2022)

Haber colaborado con músicos de tan alta talla, pertenecientes a una cultura tan distinta a la nuestra, en definitiva, fue una experiencia enriquecedora en todo sentido, no sólo profesionalmente, sino también de manera personal, pues me abrió el panorama a distintas formas de pensar. Llevar a cabo este tipo de iniciativas, en las cuales se exploran discursos distintos de aquellos a los que estamos habituados por medio de la interdisciplina y la internacionalización, es algo que debe de seguir fomentándose y es por eso que estoy agradecido con la UNAM y sus organismos que permitieron la realización de este proyecto, así como con el CCOM y sus grandiosos compositores que confiaron en mí para tocar sus obras.

Luis Angel Poblett es licenciado instrumentista en guitarra clásica, titulado con mención honorífica en la Facultad de Música de la UNAM. Ha formado parte de diversos proyectos de música de cámara principalmente enfocados en la música contemporánea, tales como el Sexteto Místico, el octeto Octamorphosis y la Camerata de Guitarras de la Facultad de Música. Ha tocado en el Palacio de Bellas Artes, la Capilla Gótica, la Fonoteca Nacional y la Sala Julián Carrillo entre otras. En 2019 obtuvo el segundo lugar en el concurso de guitarra de la Facultad de Música.

Referencias
Fuhong, Shi (2007). Illusions (partitura para guitarra). Beijing: CCOM.

Poblett, Luis Angel (2023). Las 6 armonías de las artes marciales chinas como herramienta complementaria para la interpretación de la guitarra clásica (tesis de licenciatura). México: UNAM. http://132.248.9.195/ptd2023/junio/0840980/Index.html.

Wen, Ziyang (2020). Echoes of memory (partitura para guitarra), Beijing: CCOM.

Zhao, Tianyi. (2022). Duge (partitura para guitarra). Beijing: CCOM.

Playlist
Fuhong, Ilusiones

Wen, Ecos de la memoria

Zhao, Duge
Incluye las tres piezas: https://youtube.com/playlist?list=PLVH6O59gJQPNCKTyJsGsCeG_SC3FwA5SA&si=en7exrnEIQPKumwE

Tan Dun, Ocho colores para cuarteto de cuerdas: https://youtu.be/5c8BREdisI0?si=2_50X02Znrq-lIX8
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